- Tras un viaje largo, hay que dejar descansar el motor: FALSO. El motor de un coche es una máquina perfecta, diseñada para resistir funcionando 24 horas al día, los 365 días del año, siempre y cuando haya combustible, aceite en buen estado y buena refrigeración. El error en este mito está en pretender aplicar la lógica humana de "si algo me cansa a mí, cansa a la máquina también" cuando en realidad no es así.
- Poner el cambio de marchas en punto muerto al bajar una cuesta ahorra combustible: FALSO. Si pones punto muerto, el motor tiene que recurrir al combustible para no pararse, puesto que ya no existe conexión con las ruedas. Sin embargo, al estar puesto en marcha, mantiene la velocidad estable a la vez que no gasta nada de combustible, no lo necesita si el movimiento lo obtiene de las ruedas. En un coche eléctrico, bajar una cuesta no solo no consume, sino que además va recargando la batería.
- Un motor caliente responde mejor que uno frío: VERDADERO. Por propia experiencia digo que se nota mucho la diferencia entre un motor caliente y uno frío. Con la misma cantidad de giros por minuto, en frío obtienes menos potencia que en caliente. Además, tienes que forzar más el motor al arrancar y al acelerar, lo que se traduce en un mayor consumo y un mayor desgaste de las piezas.
- Frenar en curva es peligroso: VERDADERO. Sobre todo a altas velocidades. La capacidad de giro del coche se reduce mucho mientras frenas. El ABS poco hace, puesto que se trata de un elemento que se usa en casos de emergencia, no en frenadas normales. Cuando mejor puede girarse un coche es cuando ninguno de los pedales están pisados. Procura siempre frenar antes de la curva, y si no queda más remedio, dale toques al freno, no lo mantengas pisado. Ojo, si en algún momento hay una emergencia, aunque estés en curva, frena a fondo. En ese momento tu vida está en manos de ese pedal.
- La tracción trasera es más peligrosa: FALSO. Actualmente los coches de tracción trasera tienen múltiples sistemas de seguridad que hacen que el riesgo de conducirlos sea nulo. Recuerda que, aunque al acelerar el peso se va hacia atrás, en un coche de calle el impulso nunca será tan masivo como para desestabilizar la parte delantera, y si de algún modo lo fuera, ten por seguro que el fabricante se encargaría de solucionar ese problema antes de sacar el coche al mercado.
- Cuanto más pesa un coche, más estable es: FALSO. En realidad depende de dónde esté ubicado el peso. Por ejemplo, el coche eléctrico Tesla Model S tiene la batería de 600 Kg, el motor y todos los mecanismos ubicados entre el fondo y el habitáculo de los ocupantes. Eso significa que todo su peso está centrado en la parte baja, lo que lo hace tan estable como un deportivo. Aparte, también influye la calidad de los neumáticos, de las suspensiones y la integridad de la estructura. Recuerda siempre que cuanto más pesado es el coche, frena peor, acelera peor, gasta más combustible, gasta más las ruedas y es más peligroso si pierde el control.
- Si aparcas en cuesta, es mejor hacerlo con una marcha puesta: VERDADERO. Si bajo cualquier circunstancia el freno de mano falla, las ruedas están acopladas al motor. El esfuerzo que requiere mover un motor apagado es inmenso, y aunque no evite que se te vaya el coche rampa abajo, sí que minimiza los daños porque no alcanza tanta velocidad.
